Tareas que no conocías de una oficina de diseño y arquitectura

Anímate alimentar tu curiosidad y conoce las 4 tareas que no conocías de una oficina de diseño y arquitectura de excelencia.

Pasear por cualquier punto del país es sinónimo de mezclarse de manera sigilosa entre los distintos edificios y construcciones que abarcan el paisaje urbano. Algunos llamarán más la atención que otros, pero para muchos de nosotros está claro que el proceso de construcción y diseño de cualquier proyecto es fascinante y hasta misterioso en ciertos puntos. Las distintas áreas de una oficina de diseño y arquitectura son las encargadas de hacer que, de una propuesta de un cliente, se genere todo el proceso para crear finalmente este tipo de obras.

  1. El tamaño de la oficina cambia mucho las cosas – Hay una realidad muy importante que hay que entender primero, y es que en el mundo de la arquitectura el “peso” y reconocimiento de una oficina es determinante en cómo se distribuyen las actividades a su interior. Despachos pequeños tendrán poco personal comparado contra empresas mucho más grandes y la distribución del trabajo puede llegar a ser distinta, por lo que quizás la perspectiva de un arquitecto a otro sea notablemente diferente.
  2. Equipo creativo – Quizás el aspecto con el que la gran mayoría de las personas relacionen a un arquitecto es viéndolo dibujar detrás de un escritorio. Y sí, esto sigue siendo así, pero ha cambiado un poco con el paso del tiempo. Hay equipos creativos dentro de la oficina de diseño y arquitectura que se encargan únicamente de plasmar las ideas del cliente bajo un concepto visual y funcional interesante que se apegue a las legislaciones de construcción de la ciudad.
  3. Creación de planos – Por el otro lado, una vez que el concepto está aprobado, otro equipo distinto se encarga de transformar esta creatividad al rubro digital creando planos de cada uno de los aspectos del edificio para que pueda ser visualizado por el equipo de construcción a futuro.
  4. Trabajo en sitio – No todo el trabajo se puede hacer detrás de un monitor. Hay equipos dedicados a estar realizando viajes constantes al sitio de construcción y trabajar así de la mano con el equipo de ingenieros para asegurar que todo esté de acuerdo con el plan. Habrá ajustes que deben ser regresados al equipo en la oficina de diseño y arquitectura para poder avanzar de la manera más rápida con la obra.

El enorme trabajo de decenas de arquitectos tiene una gran recompensa: ver cómo su obra se construye poco a poco y finalmente se convierte en una realidad. Con el paso del tiempo, esto se convertirá en un legado que hace que los meses de esfuerzo hayan valido totalmente la pena. Y podrían volverse edificios de icónicos como “el pantalón”.

Graciela Ramírez: